La historia de los instrumentas de tecla se remonta al monocordio utilizado durante la Edad Media, en la que fue empleado con una finalidad especulativa, tal como había hecho Pitágoras en la Antignedad. El avance del estudio musical dio lugar a que el anilisis de las relaciones interválicas y de las proporciones matemáticas del sonido fuera muy significativo. De hecho, el monocordio era un instrumento tonométrico, compuesto por una caja rectangular sobre la que había inscripciones numéricas que respondan a dIvisiones métricas. Por encima de la tabla, y montada sobre unos caballetes, tanscurría una cuerda; entre los bastidores o caballetes se colocaba un puentecillo móvil que podía ser despiazado a lo largo de la tabla y así variar la medida real de la cuerda y, por lo tanto la altura de su sonido.
El clavicordio
En el siglo XI, Guido d'Arezzo (C. 991 c. 1033) experimentó con este monochordum, que en el siglo XV contaba ya con tres cuerdas. Es el instrumento que Johannes de Muris describe en su Música specuktuva secundum Boetium (c. 1323): se trata de un pequeño monocordio provisto de teclado, que será el auténtico punto de partida de vn instrumento llamado dulcema, el antecesor directo del davicordio. Esta invención fue capital para el desarrollo de una rama instrumental que resultó decisiva para la música de Occidente, habida cuenta deque el principio emisor del clavicordio se basa en la percusión de un martillito o una pieza -la tangente- sobre la cuerda, es decir, el mismo sistema del piano. A ello sc debe el que, hasta bien entrado el
siglo XVI, los nombres de monocordio, manicordio y clavicordio lucran equivalentes; todavía en la Alemania de finales del siglo XVI gozaba de mucha estima el clavicordio, pues era un instrumento de sonido íntimo que permitía realizar gradaciones dinámicas, cualidades una y otra muy apreciadas durante el periodo de la historia de la música dominado por la búsqueda de la "sensibilidad", que explican también el éxito en la centuria posterior, del piano. Así compositores fíniseculares como Johann Gottfried Müthel (1728-1788) o Christian Gottlob Neefe (1748-1798), maestro de Beethoven, le dedicaron partituras, y es muy posible que incluso obras tan importantes como las Suites francesas (1722) y la Suites inglesas (1722) de Bach que hubieran sido escritas para este sucesor de monocordio.
El clave y el nacimiento del piano
Otro gran instrumento, muy en boga desde siglo XV, fue el clave, que se diferenciaba del clavicordio por su mecanismo, pues en él las cuerdas no se golpean, sino que se pulsan. Además contrariamente al formato rectangular del último, el clave, es aliforme y de mayor tamaño. Una caja armónica más voluminosa le ofrecía en consecuencia, una potencia sonora superior lo que le valió una rápida integración en los grupos elementales y su participación en la musica vocal y operística, a menudo como acompañante del bajo continuo. Es de notar que el fortepiano -llamado así a mediados del siglo XVIII, nombre que se trocó a finales del mismo siglo por la denominación de pianoforte, para adquirir más tarde, ya en el siglo XIX, la de piano-, fue una conjunción entre el clavicordio y el clave, ya que en el primero se inspiró su meca nismo percutor y le dió, por ende, la posibilidad realizar gradaciones dinámicas, mientras que el segundo le aportó el formato. De hecho, los primeros forepianos, construidos hacia 1698 por paduano Bartolomeo Cristofori -que menciona Scipione Maffei en el Giornale del letteratid´Italia (1711) como "gravicembalo col piano, e
forte"-, podían efectuar ciertas gradaciones decrescendo y diminuendo, fácultad que fascinó a los compositores e intérpretes, como Lodovico Giustini (1685-1743), a quien se atribuye la primera colección para el instrumento: Sonate da cimbalo di piano e forte detto volgarmente di martelletti (1732). Se trataba del elemento que, en detrimento del clave, se impuso en la Europa musical gracias a la inspiración de los maestros del clasicismo, sobre todo Mozart, y que luego, ya durante el Romanticismo, acabó por erigirse en el rey de los instrumentos músicos. La gran evolución del piano se dio durante los años que conforman el ciclo creativo entre Beethoven y Liszt, cuando adoptó la forma en que ha llegado hasta nosotros.
El órgano
Finalmente, aunque ajeno a la genealogía de los cordófonos, encontramos el órgano, instrumento de tecla-viento, de importancia fundamental en la historia musical de Occidente, que cuenta con un repertorio extraordinario, tanto en extensión como en calidad. Provisto de tubos alimentadas por fuelles -hoy por generadores res de aire, el órgano se desarrolló sobre todo a partir del siglo XI, para alcanzar siete centurias
més tarde su esplendor en la música de Johann Sebastian Bach y en la construcción de Gottfried Silbermann.
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viernes, 2 de enero de 2009
Los instrumentos de tecla
Publicado por Miriam en 19:15
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2 comentarios:
no es eso lo que yo necesito
nnadadad
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